Sábado, 17 de agosto de 2024.

Maduro fue proclamado reelecto para un tercer mandato de seis años, hasta 2031, con 52 % de los votos, pero la autoridad electoral, acusada de servirle, no ha publicado el detalle del escrutinio.

La oposición de Venezuela pidió este viernes, 16 de agosto, “mantener la batalla” en manifestaciones contra la reelección del presidente Nicolás Maduro, que denuncia como fraudulenta en medio de la presión internacional.

Maduro fue proclamado reelecto para un tercer mandato de seis años, hasta 2031, con 52% de los votos, pero la autoridad electoral, acusada de servirle, no ha publicado el detalle del escrutinio, lo que ha generado dudas incluso entre aliados como el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, que tachó al gobierno del mandatario venezolano de “autoritario”.

La oposición liderada por María Corina Machado asegura tener las pruebas que demuestran el triunfo de su candidato, Edmundo González Urrutia, y llamó para el sábado a marchar en Caracas y en más de 300 ciudades en una “gran protesta mundial por la verdad”.

“Esto no va a parar”, dijo Machado en una transmisión en vivo por Instagram con influenciadores venezolanos. Al igual que González Urrutia, está en la clandestinidad.

“Aquí todo el mundo tiene que mantener la batalla y la fuerza”, siguió. “Al saberse desnudo, entonces qué hace: mentira, represión, violencia y desmoralización. La desmoralización es la estrategia del régimen” de Maduro, aseveró.

El chavismo también convocó a una manifestación el sábado, aunque no ofreció mayores detalles.

Brasil y Colombia lideran los esfuerzos internacionales para destrabar la crisis poselectoral venezolana, con protestas en las que se han registrado 25 muertos y más de 2.400 detenidos.

“Venezuela vive un régimen muy desagradable”, expresó Lula este viernes en una entrevista radial, en la que dijo no considerar que el régimen de Venezuela “sea una dictadura”, pero sí “un gobierno con sesgo autoritario”.

El mandatario, junto a su par colombiano, Gustavo Petro, sugirió repetir las elecciones, un escenario que por ahora descartan tanto el chavismo como la oposición. Machado consideró la propuesta “una falta de respeto”.

Maduro no se refirió directamente al tema, pero insistió en que “los conflictos que hay en Venezuela (…) se resuelven entre los venezolanos, con sus instituciones, con su ley, con su Constitución”. Ya antes había descartado celebrar nuevas elecciones.

“No aceptamos imposición, intervencionismo, ni que nadie meta sus manos inmundas en nuestro amado país”, insistió el gobernante la tarde del viernes.

El Consejo Nacional Electoral (CNE) alega que no ha publicado detalle del escrutinio por ser blanco de un “ataque ciberterrorista”, que el Centro Carter y otros observadores desestiman.

Lula solicitó una vez más a las autoridades publicar resultados, mesa por mesa.

“Lo que estoy pidiendo para poder reconocer (al ganador) es por lo menos saber si fueron verdad los números. ¿Dónde están las actas? ¿Dónde está la afirmación de las urnas?”, señaló el mandatario. “Solo puedo reconocerlas si fue democrático, si muestran las pruebas”.

Maduro pidió al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) “certificar” la elección, en un recurso que académicos y opositores consideran improcedente. El proceso se encuentra en una fase de “peritaje” de las pruebas recolectadas y el veredicto, dijo la corte, es inapelable. El TSJ es acusado de estar alineado con el gobierno.

La oposición publicó en un sitio web copias de más del 80% de las actas escrutadas, que asegura prueban la victoria de González Urrutia con 67% de los votos.

Para la protesta del sábado, el llamado es a que cada participante imprima y lleve la copia del acta de votación de su mesa.

“Propuestas teóricas”

El analista internacional Mariano de Alba estimó en X que el llamado a nuevas elecciones de Lula y Petro forma parte de las “propuestas teóricas” para solucionar el conflicto.

Pero “si hubiese una mediación efectiva”, continuó, “no serían los presidentes de Brasil y Colombia quienes estuviesen haciendo propuestas públicas sobre cómo avanzar, sino que estarían trabajando con la oposición y el gobierno para tratar de que lleguen a un acuerdo”.

Estados Unidos señaló el jueves que es “absolutamente claro” que el opositor ganó los comicios, en una aparente retracción a un comentario previo del presidente Joe Biden en el que decía apoyar nuevas elecciones.

El juego parece trancado, señaló De Alba. “El gobierno se siente capaz de mantenerse cohesionado y enfrentar nuevamente un aislamiento por parte de Occidente” y “la oposición no concibe una solución distinta que el reconocimiento de su victoria y una negociación que produzca la salida del gobierno”.